Los niños soldados se ven obligados a luchar en guerras de adultos, tomar decisiones y ser testigos de cosas que ningún niño o niña deberían ver. Ninguna infancia debe ser robada por la violencia. “Cambiará mi vida y tendré un futuro mejor", Owo, uno de los 406 niños y niñas a los que ayudamos en nuestro centro para ex niños soldados en Sudán del Sur. #DíaDeLasManosRojas #RedHandDay #NecesitamosATodoElMundo